El viaje más famoso y destacado de Lorca fue el que realiza a Nueva York en junio de 1929 para impartir unas conferencias en la Universidad de Columbia y en Cuba. Su estancia en la ciudad le inspiro profundamente para escribir su obra "Poeta en Nueva York" pues se vio muy sorprendido por la sociedad norteamericana y utiliza su obra para expresar su aversión hacia el capitalismo y la industrialización de las ciudades. El 4 de marzo de 1930 abandonó Nueva York y partió hacia Cuba donde residen durante tres meses. En Cuba escribe la obra llamada "El poeta llega a La Habana" que coincide con el único poema escrito durante su estancia titulado " Son de negros en Cuba".
Tras su vuelta a España, Lorca emprende un viaje a Argentina y Urugüay en 1933 para promover la puesta en escena de algunas de sus obras por la compañia teatral de Lola Membrives y para dictar una serie de conferencias. El poeta vuelve a España después de cinco meses y elogia la ciudad de Buenos Aires al decir que es una ciudad maravillosa y que le gustaria que España fuera así.
Además de estos lugares, también tenemos constancia de los viajes del poeta a Londres y a París pues se conservan algunas cartas de la madre de Lorca a su hijo en las que hace referencia a este hecho.
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